MIWE variobake

¿Hornear en un circulador de gas de combustión como si fuera un horno de aceite térmico y al mismo tiempo disponer de todas las características del gas de combustión? Muchos panaderos llevan tiempo esperándolo. Eso ofrecería nuevas posibilidades y una importante flexibilidad en la panadería. Y permitiría obtener productos horneados muy diferentes en un solo sistema de horno.

¿Ofrecería? ¿Permitiría? Olvídese del subjuntivo. Aquí está MIWE variobake. Una tecnología que permite controlar el comportamiento térmico y las características de horneado de un sistema de horno dentro de unos límites mucho más amplios que antes. Por ejemplo, hornear en un MIWE ideal e+ como si fuera un horno de aceite térmico. O un horno de leña tradicional. O, incluso, el típico circulador de gas de combustión.

Regulación de la temperatura más flexible y precisa
MIWE variobake facilita una regulación de la temperatura más flexible y precisa que antes en la cámara de horneado. Tradicionalmente, los hornos de piso calentados con gas de combustión funcionan con quemadores que solo conocen dos estados: encendido y apagado. Es decir, máxima potencia y punto muerto. Por tanto, solo pueden aproximarse a una curva de temperatura. La temperatura real siempre «oscila» un poco en torno al valor fijado. Y siempre se calienta a plena potencia. La entrada de energía puede aumentar mucho muy rápidamente, demasiado para algunos productos horneados.

La lógica inteligente controla el quemador modular
En MIWE variobake, hay dos cosas que se combinan para hacer posible un control mucho más suave y preciso de la potencia del quemador y de la transferencia de energía a la masa: un quemador modular, cuya potencia puede regularse infinitamente como ocurre con un pedal acelerador, y una lógica inteligente en el mando MIWE TC, que garantiza de antemano que el quemador siempre funciona exactamente al nivel de potencia requerido para la entrada de energía deseada.

• Dosificación mucho más precisa de la cantidad de calor que se transmite a la masa. Abastecimiento más específico de los productos con la correspondiente energía necesaria.
  
• Mayor homogeneidad y equilibrio en el sistema.
  
• Importante reducción del efecto llama típico del gas de combustión, el horno no sobresale.
  
• Mejora significativa de la cocción de lotes sucesivos, cálculo preciso del tiempo de horneado.
  
• Características de horneado flexibles que imitan otros sistemas de horneado (como el horno de aceite térmico, de tubo anular o de leña). Amplía el espectro de aplicación del horno y puede permitir ahorrar la inversión en otro sistema de horno.
  
• Ahorro energético gracias a la eficaz prevención de sobrecargas, a los tiempos de calentamiento más cortos y a las temperaturas de introducción más bajas.
  
• Costes de mantenimiento reducidos, mayor durabilidad y mejores valores de emisión de gases gracias a los quemadores de funcionamiento modular.
  
• Transición sencilla, ya que no se requieren cambios en los procesos previos (recetas, fabricación de masa, etc.).