Los hornos de convección regulan la temperatura de la cámara de horneado a través de la potencia del elemento calefactor y la circulación del aire. Los productos fríos que se introducen para hornearse actúan como una especie de «contrarrefrigeración».
Si se introduce una cantidad menor o una masa más caliente de lo habitual, esta «contrarrefrigeración» será menos pronunciada y la curva de temperatura en la cámara será bastante más «cálida». Por el contrario, si la puerta permanece abierta mucho tiempo, la cámara de horneado se enfriará considerablemente. Estas y otras oscilaciones similares se producen constantemente en los procesos; como resultado, sucede que un programa de horneado optimizado para un proceso concreto no llega a ofrecer unos resultados óptimos.
Compensación de las oscilaciones en los procesos
MIWE flexbake® se encarga de que la estación de horneado compense estas y otras oscilaciones similares que ocurren durante los procesos de manera automática, inteligente y flexible. Para ello, «aprende» una sola vez (por producto/programa de horneado) en las condiciones ideales (ocupación completa, temperatura de inserción adecuada de los productos). El sistema guarda el perfil de temperatura registrado y, a partir de entonces, en el modo flexbake® regula siempre la temperatura de la cámara de horneado según este proceso ideal.
Así consigue siempre el mismo resultado perfecto aunque haya oscilaciones en el proceso.
En la revista MIWE impulse puede encontrar más información sobre el tema.